MAÑANA se reunirán los líderes el G8 en Evian, Francia, donde intentarán lograr lo imposible: enterrar sus diferencias y al mismo tiempo proteger sus intereses. Ya hay 25,000 policías y militares de Francia, Alemania y Suiza concentrados en las afueras de Ginebra y Annemasse, Francia, donde se realizarán varios de los eventos alternativos. Eso equivale a un policía o militar por manifestante, aunque se espera que 100,000 personas se sumen a la manifestación masiva el día domingo –la cifra sería mayor si no fuera por los paros que el sector público está realizando contra la reforma del régimen jubilatorio en Francia, que la semana pasada congregaron a 400.000 personas en las calles y que continuarán durante esta semana. Las montañas que rodean Ginebra y Evian aparentemente están cubiertas de misiles anti-aéreos, y el rumor que corre es que EE.UU. trajo 11 de sus lanchas de alta velocidad para asegurarse de que el Presidente Bush esté protegido de los manifestantes listos para sumergirse en las frías aguas del Lago Ginebra.
Dado el débil estado de la economía mundial, las cada vez más profundas divisiones en el consenso de la élite y el rechazo masivo al G8 en las calles, la maquinaria oficial de relaciones públicas tendrá que trabajar el triple para garantizar que sea cual fuere el resultado de la Cumbre el público reciba el mensaje de que la economía mundial está en manos seguras, que la ronda de comercio de Doha está bien encarrilada, y que el G8 ha encontrado una forma cortés de compartir su poder. No les crean ni una palabra: la Vieja Europa y EE.UU. están a océanos de distancia en sus percepciones respecto a su lugar en la historia. El Presidente Chirac –como un verdadero hijo de De Gaulle- cree en un mundo multipolar donde “La France” asuma el lugar que le corresponde. A Bush, por otro lado, no le mueve un pelo y en la nueva era de impunidad inaugurada con la invasión y ocupación de Iraq, no tiene interés alguno en compartir su poder con otros. Es más, la globalización está demostrando no ser todo lo que prometía ser: la deflación (o inflación dependiendo del experto que uno lea) está a la vuelta de la esquina, el crecimiento no está a la vista y las cifras de deuda, productividad y desempleo interno son suficientes para llevarte a guardar el dinero debajo el colchón. Probablemente se trate de una verdad matemática, que el tamaño de los problemas del mundo sea inversamente proporcional a la legitimidad de los líderes mundiales y a su capacidad (y voluntad política) para hacerse cargo ellos.
Esto no quiere decir que las decenas de miles de activistas que se congregarán en Annemasse o al otro lado del lago, en Ginebra, tengan expectativas ó se hagan ilusiones respecto a la posibilidad de explotar la gran lucha por el poder para entrar a una nueva era del multilateralismo. Ambos lados del Atlántico –cualquiera sea su posición frente a la guerra- ofrecen una visión del mundo que no está en sintonía con el ánimo y las exigencias de los movimientos por la paz y contra la globalización comandada por las transnacionales. Un nuevo hacer político se está construyendo en Annemasse y Ginebra, en los Foros Sociales Mundiales, y en incontables espacios y procesos democráticos nacionales y locales. Y aun cuando podamos disfrutar la escena del Grande y del Bueno mordiéndose las espaldas y, de tanto en tanto, aprovechar las contradicciones internas que eso nos depara, el futuro no será anunciado en la declaración del G8 la próxima semana.
En esta entrega de Enfoque sobre Comercio les acercamos un balance de la situación de la OMC en Ginebra, a tan sólo 60 días hábiles de Cancún, un informe de la asamblea mundial contra el ALCA y la OMC en México (anunciando los días de movilización clave en Cancún, 9 y 13 de setiembre), una guía para activistas sobre la historia del G8, y algunas reflexiones sobre por qué los gobiernos africanos regresan al G8 año tras año, aun cuando siempre se van con las manos vacías.
EN ESTA ENTREGACUENTA REGRESIVA HACIA CANCÚN: PROCESOS DE NEGOCIACIÓN TURBIOS, EXCLUYENTES Y “SIN REGLAS”
por Aileen Kwa
A DESCARRILAR LA 5ta CONFERENCIA MINISTERIAL DE LA OMC!
Llamado de la Asamblea Continental y Mundial contra el ALCA y la OMC
Ciudad de México, 11-12 de mayo del 2003
GUÍA PARA ACTIVISTAS SOBRE EL G8
por Christophe Aguiton
ÁFRICA EN EVIAN: SI SE REÚNE EL G8, DEBE SER HORA DE “DIGNIFICAR” LA NEPAD (nuevamente)
por Patrick Bond